Tres años atrás y una rodilla biónica...

Tres, sí 3 años. No podía ni moverme y ahí sí literalmente fueron 40 días en cama, si me médico me detallaba lo que iba a ser el posoperatorio creo que aún estaría pensando en operarme o no, sin muchas explicaciones específicas, hay veces ha mayor ignorancia más feliz se es.

El porqué del título, según el diccionario de la Real Academia Española biónico, ca significa: 

Del ingl. bionic, y este de bio- 'bio-' y electronic 'electrónico'.
2. adj. Obtenido por procedimientos biónicos. Se le implantó un brazo biónico.
3. f. Tecnol. Aplicación del estudio de los fenómenos biológicos a la técnica de los sistemaselectrónicos y 
mecánicos.
4. f. Med. Desarrollo de órganos artificiales que recuerdan el funcionamiento natural por medioselectromecánicos.
Fue una intervención de en mi rótula izquierda, implante de 2 tornillos y 2 roscas, y injerto de cartílago propio, que fue lo más doloroso en cuanto a cicatrización. Me rozabas un cabello y me dolía hasta la punta del dedo gordo del pie, literal.


Fue casi un año antes que me mentalicé que tenía que operarme, fue mucho tiempo de convivir con dolor...Lo traté en terapia: tenía que bajar de peso, mi mayor miedo el posoperatorio, la rehabilitación, ¿quién me iba a cuidar tanto tiempo? Porque necesitaba que cuidaran de mí, desde abrir la puerta hasta acompañarme al baño.

Acondicionar un departamento que no tenía gas natural a convertir todo en eléctrico, las comidas, un auto (que por meses fue a la casa de mi hermano) y todo el circo en el que vivimos.
Mi mamá estuvo las primeras 3 semanas conmigo, viviendo en el departamento, que a todo esto estaba sin gas en el edificio desde octubre pasado, un detalle no menor, aunque me había ocupado de acondicionar todo lo que fuese la parte eléctrica del mismo.

   

 

En el mientras tanto, mis amigos y mi hermano (no tengo una familia numerosa por eso siempre digo que mis amigos son para mí la familia que uno elije) hacían postas para pasarse las llaves de mi depto. para poder venir a cuidarme, visitarme o entretenerme, esos ratos compartidos que me dedicaron eran un mimo para mí, con algunos hablábamos día x medio a pesar de los km de distancia ahí estaban, al pie del cañón.

Es difícil para una persona independiente, algo exigente y auto suficiente también, depender de otros para todo, aunque sea transitoriamente.

Acá con Noe, creo que fue al mes de operarme y
me trajo un almuerzo chatarra de los que extrañaba

Agradezco infinitamente a mi Médico traumatólogo y a mi Kinesiólogo por toda su profesionalidad y humanidad. Soy una convencida que a las personas y las circunstancias te las pone Dios en el momento indicado. Y así fue con ellos, pusimos fecha, y ahí nomás le dije a médico que me iba a viajar porque después no lo iba a poder hacer por meses y así fue, él me indicó que hacer por si se me hinchaba en las caminatas y por el viaje...Todo salió según lo esperado y hasta mejor. Porque en mi vida todo hecho importante se resuelve con un viaje, y esto lo meritaba, también para festejar el éxito de la operación fue con otro viaje, donde necesitaba manejar yo, pero antes fui a Alcorta como para practicar, porque debo decir que me costó mucho volver a poder estacionar bien, parecía que se me aflojaba la rodilla cuando apretaba mucho el embrague.

Si me preguntan mi mayor temor nunca fue la cirugía en sí, ni a la anestesia total, ni a rechazar las prótesis porque en eso estaba segura del profesional en el que ponía mi vida en sus manos, literal. Que diríamos sería lo normal, mi miedo era al posoperatorio y creo que eso todos los sabían aunque sea implícitamente.

Un GRACIAS enorme a todos los que estuvieron conmigo en ese momento tan importante de mi vida.
Y un GRACIAS así de grande a Dios por todo!, lo bueno y lo malo, por sostenerme siempre.

Este post fue escrito más a modo de diario íntimo que como blogger (que obviamente no lo sería jaja), solo intento rescatar lo bueno que la vida nos da, aunque en estos momentos no es sencillo verlo. 

Hasta pronto. 
Cariños.
Vero.  

Veronica Godoy. Todos los derechos reservados. © Maira Gall.